Caso de éxito: Planta de biomasa de vetejar (Palenciana-Cordoba)
La planta de biomasa de Vetejar, propiedad de Oleícola El Tejar y ubicada en Palenciana, Córdoba, se ha convertido en un referente de innovación y sostenibilidad en el sector energético español. Fue la primera en España en utilizar una caldera de biomasa de lecho fluidizado, en 1996, con el fin de valorizar los residuos que generaba la industria olivarera andaluza. Esta planta de 12.5 MWe ha enfrentado desafíos significativos, especialmente en los calurosos veranos andaluces, donde la escasez de agua amenazaba su viabilidad.
Fruto de una reunión mantenida en Genera en 2017 con el staff técnico de Oleícola El Tejar, la cooperativa tomó una decisión audaz: apostar por la Tecnología de Ciclo Higroscópico (HCT) desarrollada por IMATECH. Esta elección no solo transformó la operación de la planta, sino que también tuvo un impacto económico y social profundo en la comunidad local al eliminar el riesgo de viabilidad de la planta ligado al agua.
Desafíos de la Planta de Biomasa en Palenciana
Para entender la importancia de esta decisión, es fundamental analizar el contexto en el que se encontraba la planta.
La planta de biomasa de Oleícola El Tejar se sitúa en una región donde la disponibilidad de agua es limitada, y no solo eso, la calidad de la misma empeoraba año tras año, elevando los costes de mantenimiento y generando problemas en otras áreas. Durante los meses de verano, las altas temperaturas y la escasez de agua hicieron que la operación de la planta se volviera insostenible. A pesar de invertir en aeros adiabáticos como alternativa para ahorrar agua respecto a su sistema inicial basado en torre de refrigeración, la condensación del vapor y las altas temperaturas ambiente, superiores a 25 °C muchas horas del año, seguían obligando a Oleícola a consumir una gran cantidad de agua y no solucionaba el problema, que era muy significativo para la operación de la planta. Sin una solución efectiva, la planta corría el riesgo de cerrar, lo que pondría en peligro no solo la viabilidad económica de la planta, sino también los puestos de trabajo y la gestión de residuos muy nocivos para el medio ambiente que la actividad olivarera genera.
Ante esta situación crítica, la cooperativa, que ya contaba con una larga trayectoria en la producción de aceite de oliva y derivados, se enfrentaba a un dilema: continuar con un modelo de negocio que amenazaba su viabilidad o buscar una solución innovadora que les permitiera adaptarse a las nuevas realidades ambientales.
Fue en este contexto que la cooperativa decidió explorar nuevas tecnologías que pudieran mejorar la eficiencia de la planta en los períodos de altas temperaturas exteriores y, especialmente, reducir o eliminar su dependencia del agua.
La Innovación de la Tecnología de Ciclo Higroscópico (HCT)
La Tecnología HCT, desarrollada por IMATECH, es una evolución del ciclo Rankine, que ha sido utilizado durante más de un siglo en la generación de energía. Lo que distingue al ciclo higroscópico es su capacidad para condensar vapor de manera eficiente sin necesidad de agua de refrigeración. Justo lo que Oleícola El Tejar buscaba. En un momento en que la viabilidad de la planta de biomasa estaba en peligro, la cooperativa decidió dar un paso audaz y adoptar esta tecnología.
La cooperativa confió en el potencial de la HCT para resolver sus problemas operativos, a pesar de que, en ese momento, la tecnología solo contaba con una planta piloto y sin referencia sobre su efectividad a gran escala. Este tipo de decisiones es fundamental en el mundo empresarial, donde la innovación a menudo implica asumir ciertos riesgos.
Resultados de la Implementación de HCT en la Planta de Biomasa
La implementación de la tecnología HCT en la planta de Vetejar comenzó en el verano de 2017 y ha sido un éxito rotundo. Desde su instalación, la planta ha operado alrededor de 54.000 horas sin incidencias, lo que demuestra la fiabilidad de la tecnología.
A continuación, se detallan los beneficios más destacados que ha aportado su implantación:
1. Aumento de la Temperatura de Refrigeración
Una de las mejoras más significativas fue el aumento de 13 °C en la temperatura de refrigeración de salida de los aerorefrigerantes, manteniendo las mismas presiones de condensación. Este incremento es importante para optimizar el rendimiento de la planta y mejorar la eficiencia en la generación de energía.
2. Ahorro de Agua en la Operación de la Planta
La HCT permitió eliminar completamente el consumo de agua de refrigeración, lo que equivale a un ahorro de 229.200 m³/año. Eliminar este consumo, es especialmente relevante en una región donde el agua es un recurso limitado y no siempre disponible. Al eliminar la dependencia del agua, la planta no solo se volvió más sostenible, sino que independizó su funcionamiento de la disponibilidad de agua y eliminó el coste del agua.
3. Reducción de Autoconsumos Energéticos
La planta experimentó una disminución en sus autoconsumos de 1.520 MWh/año. Esta reducción no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también contribuye a la rentabilidad de la planta, permitiendo que más energía generada se destine a la red eléctrica.
4. Aumento de la Disponibilidad y Producción de Energía
La implementación de la HCT permitió a la planta trabajar a presiones de condensación medias anuales más bajas, lo que se tradujo en la generación de 900 MWh/año adicionales. El aumento en la disponibilidad de la planta que se produjo, es un indicador claro de la efectividad de la tecnología y de su capacidad para maximizar la producción de energía.
5. Amortización Rápida de la Inversión
Finalmente, uno de los aspectos más destacados de la implementación de la HCT es que la inversión realizada se amortizó en menos de un año. Este rápido retorno de la inversión es un testimonio de la viabilidad económica de la tecnología y de su capacidad para generar beneficios tangibles en un corto período.
Impacto Económico y Social de la Tecnología HCT
La decisión de Oleícola El Tejar de adoptar la HCT no solo tuvo un impacto positivo en la operación de la planta, sino que también tuvo repercusiones significativas en la comunidad local. La viabilidad de la planta aseguraba la continuidad de numerosos puestos de trabajo, lo que es fundamental en una zona donde la economía local depende en gran medida de la agricultura y la Industria olivarera.
La implementación del HCT les permitió no solo mantener su operación, sino también mejorar su competitividad. La reducción de costos operativos y el aumento de la eficiencia fortalecieron la posición de la planta en un sector cada vez más competitivo y regulado. Como consecuencia de estos buenos resultados, en 2018 y 2020 se decidió instalar el HCT en dos de sus plantas de biomasa, con los mismos excelentes resultados obtenidos en esta primera planta.
Además, el éxito de la planta de Vetejar ha servido de ejemplo para otras empresas del sector energético en la adopción de nuevas tecnologías que son fundamentales para enfrentar los desafíos ambientales y económicos del futuro.
Conclusión
El caso de Vetejar no es solo un éxito, sino un ejemplo que muestra el camino hacia un futuro energético más eficiente y sostenible. A medida que enfrentamos desafíos globales como el cambio climático, la escasez de recursos hídricos y la descarbonización de procesos Industriales, casos como este nos demuestran que las soluciones están a nuestro alcance.
Solo se necesita visión, compromiso y la disposición para adoptar la innovación